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RENAULT MÈGANE COUPÉ-CABRIO. EL CIELO DE FONDO 365 DÍAS AL AÑO
Con el techo cerrado, el Nuevo Mégane Coupé-Cabrio es un coupé de diseño elegante que atrae las miradas. Además, ofrece las intensas emociones de un cabrio. Sus grandes superficies acristaladas y su parabrisas dejan a la vista el cielo… Un espectáculo infinito para una conducción a cielo abierto durante 365 días al año. Con el techo abatido, el Mégane Coupe-Cabrio brinda la sensación de aire libre de un cabrio auténtico gracias a su parabrisas avanzado. Evadirse, liberarse, llenarse de oxígeno protegido por el Wind Deflector*.
LOS DETALLES QUE CONFIRMAN UN ESTILO
La sobriedad del negro. El resplandor del cromado. La elegancia se reinventa en todos los detalles: el cinturón del habitáculo y los montantes del parabrisas en color cromado, el techo y los retrovisores de color negro brillante… Los materiales conviven en perfecta armonía. Con el techo acristalado, el cielo se proyecta hacia el infinito. Cada viaje se convierte en un espectáculo.
TECNOLOGÍA ÚTIL
En el interior del Renault Mégane Coupé-Cabrio, todo está enfocado al placer. Placer de conducir con todos los avances tecnológicos de Renault, como el Sistema multimedia R-Link que ha sido concebido para ser utilizado de forma intuitiva y, evitar así apartar la vista de la carretera. O la tarjeta manos libres, o el contador analógico con regulador y limitador e velocidad…Una tecnología que facilita la vida del conductor para que pueda concentrarse en lo más importante: el placer de la conducción.